U18M: Un bronce que sabe a oro (56-57)
7/28/2013 España doblega a
Letonia con un triple de Juancho Hernangómez a falta de 2.6 segundos
para el final. Los chicos de Cuspinera jamás se rindieron, pese a ir a
remolque todo el partido. El casi triple-doble de Porzingis (11 puntos,
15 rebotes y 9 tapones) no sirvió al anfitrión
FRANCISCO RABADÁN
Primer cuarto (17-12): Las cartas sobre la mesa
Primer cuarto (17-12): Las cartas sobre la mesa
Letonia salió al campo dispuesta a
tumbar a España desde el primer instante. Los locales no se guardaron
ninguna de sus cartas y ya desde los primeros minutos la pareja
Porzingis-Pasenicks se mostró en toda su dimensión. Los nuestros apenas
podían pisar la pintura rival sin ver cómo sus tiros eran taponados,
intimidados o directamente cortados. Cuspinera se percató pronto de que
los bálticos saltaban a todo y encomendó a Iriarte la misión de sacar
faltas a los hombres altos con éxito.
Segundo cuarto (32-25): Letonia abre brecha
Dos triples consecutivos del tirador
Geks y del pívot Smits dieron su máxima ventaja a los locales con diez
tantos de ventaja. España reaccionó de la Sans y aumentando agresividad
defensiva para minimizar pérdidas. Los letones no eran igual de eficaces
sin sus dos torres en cancha. Pasenicks estaba ausente por culpa de sus
tres faltas y España vislumbraba un halo de esperanza.
Tercer cuarto (43-41): Fundamental la pizarra
Tras la habitual siesta al inicio de
la segunda mitad, los nuestros tomaron la determinación de
cortocircuitar los ataques rivales con variantes defensivas en zona.
Cuspinera empleó la 1-3-1, la 2-3 y la presionante para incordiar a los
pívots y obligar al rival a tirar desde lejos. España firmó un parcial
de 11-0 en apenas tres minutos con Diop y Sans haciendo daño al rival.
Geks y Porzingis, sin embargo, no habían dicho su última palabra y
mantuvieron a los suyos por delante antes del cuarto decisivo.
Último cuarto (56-57): Se culminó la vendetta
La táctica de Cuspinera de desgastar
a los pívots rivales tuvo premio nada más iniciarse el periodo final
con la eliminación de Pasenicks, a quien Smits estaba supliendo con
resultados aceptables. España tocaba con la palma de los dedos empatar
el partido, pero cada vez que se aproximaba Porzingis daba un nuevo
estacazo ya fuera en forma de canasta o tapón. Los últimos minutos
fueron de infarto con cada equipo disfrutando de múltiples segundas
opciones. El triple ansiado lo logró la confianza ciega en Marc García
–había fallado los tres anteriores- a falta de 24 segundos. Plavnieks
anotó dos tiros libres a falta de 11 segundos. España no tenía tiempos
muertos, pero sí la pizarra mental de Alberto Martín. El base madrileño
atrajo a toda la defensa letona sobre su persona y encontró a su amigo y
paisano Hernangómez clavado en la línea de tres. El ala-pívot de
Estudiantes fintó el lanzamiento para quitarse de encima a dos
defensores y con todo el campo libre para penetrar decidió dar un pasito
atrás y clavar un triple digno de estrella de la NBA. Porzingis tuvo la
última, pero toda España se cerró sobre el gigantón de 2,12 que apenas
pudo levantarse
La Clave
La fe de España: El equipo de Cuspinera nunca dejó de creer en sus opciones y peleó hasta el final ante un rival que lo tenía todo a su favor para ganar. Los chicos han aprendido la valiosa lección de saber remontar los partidos, algo que ellos mismos habían sufrido en sus carnes tres veces en el torneo.El Detalle Técnico
España sólo había conseguido anotar 3 de 16 triples en el partido hasta antes de 30 segundos para la conclusión, pero no dejó de creer en sus opciones y anotaron los dos últimos Marc García y Juancho Hernangómez. Las zonas de Cuspinera en el tercer cuarto resultaron esenciales para remontar la máxima renta letona que estuvo en los 11 puntos.El Momento
El triple de Hernangómez fue tan inverosímil como genial que provocó que su entrenador se lesionara a la reacción del mismo. Toda Letonia tembló ante la espectacular jugada de Juancho, que ya tiene una canasta en sus vitrinas que muchos esperan toda una carrera.Los Protagonistas
Hernangómez consiguió la canasta ganadora, pero no se habría llegado con opciones de no haber sido por la gran defensa conjunta de España y las canastas en los momentos de atraque de Sans (18 tantos). Por parte de los letones es imposibles no aplaudir el partidazo de Porzingis, que se quedó a un tapón de conseguir un triple-doble: 11 puntos, 15 rebotes y 9 tapones.Conclusión
España ha conseguido una medalla de bronce que sabe a oro por la gran evolución de este equipo durante el campeonato y porque jamás ha bajado los brazos ante ningún rival por muy superior que pudiera parecer. La generación del 95 tiene un aspecto excepcional para futuras citas. El baloncesto español de base sigue creciendo con medallas y casta.
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